Francisco Arriví nació en San Juan de
Puerto Rico en 1915. Estudia el bachillerato en Pedagogía, con
especialización en Lengua y Literatura Españolas, en la Universidad de
Puerto Rico. Forma parte del coro dirigido por Augusto Rodríguez. Compone
letras para no menos de veinte corales, entre ellas la del Himno de la
Universidad, recientemente adaptado como himno de las Universidades de la
República de Colombia. Trabajó como profesor de Lengua y Literatura Españolas
en la Escuela Superior de Ponce (1938-1941). Fundó Tinglado Puertorriqueño,
sociedad dramática de estudiantes y bajo ese nombre estrena sus obras
Club de solteros (1941) y El diablo se humaniza (1940) ambas, obras en un
acto. Se interesa en Areyto (1949) Viene a trabajar a la Escuela del Aire,
luego de premiársele el libreto De la jungla al rascacielo, presentado en
el concurso radial de programas dramatizados y en la dirección de los
mismos. Esta práctica le ayuda a desarrollar una mayor consciencia de
teatro. Para esta época dirige los dramas Hilarión (1943) y Nuestros Días
(1944) de Manuel Méndez Ballester, escribe las series para radio, Alma de
la leyenda, Hacienda Villareal, Héroes de la guerra y Páginas de nuestra
historia. Revive el Tinglado Puertorriqueño (1945) al amparo del cual
monta su primer drama en tres actos Alumbramiento (1945) y luego, María
Soledad (1947).
La Fundación Rockefeller y la Universidad de Puerto Rico le conceden en
1948, una beca para estudiar radio y teatro en la Universidad de Columbia
donde escribe Caso del muerto en vida.
Regreso a Puerto Rico y ocupa el puesto de director de programas de la
radioemisora WIPR. Allí intensifica la producción desde un punto de
vista dramático.
Bajo el nombre de Tinglado Puertorriqueño, monta el drama Caso del muerto
en vida (1951) en el que pone en juego nuevas técnicas teatrales. Refunde
(Club de solteros), obra con acercamientos al teatro del absurdo, y lo
monta en 1953.
Recibe el nombramiento como director de radioemisión pública (WIPR-Radio).
En 1951, crea Ayer y hoy, primer programa
de televisión transmitido en Puerto Rico (Caribe Hilton, circuito cerrado).
Ha contribuido también al libreto de televisión con El Niño Dios y Luis
Muñoz Rivera.
Escribe Bolero y plena, en 1955, suite de dos obras en un acto, que monta
el Teatro Universitario en 1956. Esta, junto con Vejigantes, que monta el
Primer Festival de Teatro Puertorriqueño (1958) y Sirena, que monta el
Teatro Experimental del Ateneo en 1949, constituyen la trilogía Máscara
puertorriqueña. Medusas en la Bahía, (obra de Bolero y plena) aparece en
la antología Teatro breve hispanoamericano. Vejigantes, que recibe premio
del Instituto de Literatura en 1959 aparece en Teatro Latinoamericano
(1964), antología publicada por Frank Dauster en Estados Unidos.
Desde temprana edad Francisco Arriví ha
cultivado la poesía. En 1957 escribe el poemario Isla y Nada que publica
en 1958 y recibe el premio del Círculo Cultural Yaucano en 1959. Luego
escribirá Frontera (1960) que recibe premio del Instituto de Literatura
Puertorriqueña y el Círculo Cultural Yaucano, Ciclo de lo ausente
(1962), Escultor de la sombra (1965) y En la tenue geografía, están inédito.
La Sociedad de Autores le premia Auto de Fe (1964). El Festival de Navidad
del Ateneo le premia Cántico para un recuerdo (1964) y Absurdos contra la
muerte (1965).
Francisco Arriví ayuda a formular el Proyecto para el fomento de las
artes teatrales en Puerto Rico (1956) del Instituto de Cultura
Puertorriqueña el cual culmina en el Primer Festival de Teatro
Puertorriqueño (1958). En 1959, ocupa el puesto de director del Programa
de Teatro del Instituto de Cultura Puertorriqueña. Organiza y dirige en
1961 el Primer Seminario de Dramaturgia en el cual presenta además la
ponencia Evolución del autor dramático puertorriqueño a partir de 1938.
El mismo se traduce en el libro El Autor Dramático en el cual se recogen
las ponencias de los participantes. En 1964, el Séptimo Festival de
Teatro Puertorriqueño le escenifica Cóctel de don Nadie, un desarrollo
estilístico de Club de solteros. Dirige los Festivales de Teatro .
Hasta el momento, Francisco Arriví ha publicado sus dramas María
Soledad, Club de solteros, Bolero y plena, Vejigantes, Sirena y cóctel de
don Nadie, sus poemarios Isla y Nada, Frontera, Ciclo de la ausente y
Escultor de la sombra, sus libros de ensayos y artículos: Entrada por las
raíces, Conciencia puertorriqueña del teatro contemporáneo (1938-1956)
y Areyto Mayor. Ha publicado los dramas El diablo se humaniza,
Alumbramiento, Caso del muerto en vida, Un cuento de hadas, Teatro plural
y el poemario En la tenue geografia.
Ha escrito los poemarios En la tenue geografla (1971) y Ceiba, areyto, cemí,
coquí (1980). Es también un destacado escritor de guiones para series de
televisión y radio, especialmente se encuentran Héroes de la guerra,
Hacienda Villa real, Páginas de nuestra historia, Alma de la leyenda. Su
dedicación y laboriosudad en la organización de festivales de teatro por
muchos años en Puerto Rico, le merecen el nombre de figura cimera en el
quehacer teatral en la Isla y sobre todo, en el más ferviente promotor
del desarrollo del Teatro Puertorriqueño.
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