Siria

 

 

 

La República

 

El periodo de posguerra estuvo marcado por una seria inestabilidad política. En 1944 se inició el movimiento de la 'Gran Siria' para fundar un estado árabe que englobaría Líbano, Siria y las actuales Jordania e Israel. Sin embargo, muchos sirios se oponían, temerosos de que Siria quedara absorbida en un gran estado árabe donde perdiera su identidad nacional. No obstante, el movimiento impulsó la adhesión siria a la Liga Árabe, que se formó en un principio para prevenir la creación de un Estado judío en Palestina. Siria participó en la guerra de 1948 que enfrentó a las fuerzas árabes y al recién creado Estado de Israel; la guerra concluyó con un armisticio en julio de ese mismo año. El 30 de marzo de 1949 una junta militar dirigida por el general Husni al-Zaim, miembro de la minoría kurda, se hizo con el poder. Otra junta militar derrocó en agosto al nuevo régimen, que era esencialmente una dictadura y muy impopular, y Zaim fue ejecutado. En noviembre se celebraron elecciones generales para formar una Asamblea Constituyente, pero un tercer golpe de Estado, encabezado por el coronel Adib al-Sisakli, antiguo jefe de policía y destacado dirigente de la seguridad nacional, tuvo lugar en diciembre. La Asamblea Constituyente promulgó una nueva Constitución en septiembre de 1950 y, asumiendo la responsabilidad como Cámara de Diputados, eligió al jefe del gobierno provisional Hasim al-Atasi, un respetable político de edad, para la presidencia del país.

Las fuerzas fronterizas de Siria e Israel chocaron en numerosas ocasiones en la primavera de 1951. Las hostilidades, provocadas por la oposición siria a un proyecto de regadío israelí en la zona desmilitarizada entre los dos países, cesaron el 15 de mayo después de la mediación del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Las sucesivas crisis gubernamentales durante 1951 culminaron el 29 de noviembre en otro golpe de Estado ideado por Sisakli. El presidente Atasi dimitió poco después y Sisakli y sus partidarios formaron gobierno. Se promulgó una nueva Constitución en 1953, fueron reprimidas severamente las libertades civiles y Sisakli gobernó el país como dictador hasta marzo de 1954, cuando fue destituido por otro grupo militar que restituyó a Atasi como presidente, reorganizó la Cámara de Diputados de 1949 y restauró la Constitución de 1950.

Después de 1954, Siria desarrolló una política anti occidental y cercana a las tesis soviéticas. El gobierno protestó enérgicamente en 1955 contra la creación del Pacto de Bagdad, una alianza defensiva formada ese año por Turquía, Irak, Irán, Pakistán y Gran Bretaña.

En julio de 1956, la Cámara de Diputados siria aprobó el establecimiento de un comité para negociar los términos de una posible federación con Egipto. Los ataques a Egipto en octubre y noviembre de 1956 de Israel, Gran Bretaña y Francia (durante la crisis del canal de Suez) sirvieron para intensificar el crecimiento del resentimiento sirio hacia Occidente.

Siria denunció la denominada Doctrina Eisenhower, promulgada en enero de 1957 para combatir la presencia comunista en Oriente Próximo. En septiembre, Siria acusó a Turquía de concentrar tropas en la frontera común que serviría de apoyo a un hipotético ataque de Estados Unidos a Siria. La URSS apoyó la acusación siria y el asunto se llevó ante la Asamblea General de la ONU en octubre. La reclamación siria se retiró con el consentimiento de los interesados antes de que la ONU llevara a cabo ninguna acción. A lo largo de 1957 Siria aceptó un incremento de ayuda militar y económica por parte de la URSS que en octubre se amplió a un periodo de 12 años, con el fin de realizar varios proyectos a gran escala que permitieran el desarrollo del país.