Italia |
El comienzo de la edad moderna Durante el siglo XVI los Estados italianos fueron
presa de otros países. En 1499, Luis XII, rey de Francia, sucesor de
Carlos III, conquistó Milán. En 1501, Fernando II el Católico, rey de
Sicilia desde 1468, unificó en una única corona los reinos de Nápoles y
Sicilia. La rivalidad entre el emperador Carlos V y Francisco
I, rey de Francia, provocó una nueva invasión francesa de Italia en
1524. A pesar de la ayuda de aliados florentinos, genoveses y venecianos,
la invasión terminó resultando un fracaso. Con la firma de la Paz de
Cambrai (1529) el rey Francisco I renunciaba a todas sus pretensiones
sobre el territorio italiano, y aunque en la década de 1540 intentó
nuevamente reanudar el conflicto, no pudo socavar la hegemonía del
emperador Carlos V en Italia. Cuando en 1535 la familia Sforza perdió el
control de la ciudad de Milán, el emperador se hizo también con el
control del ducado, por lo que el Milanesado fue una posesión española
durante casi doscientos años. Sólo Génova y Venecia conservaron su
poderío de entre todos los Estados italianos. El último gran logro de
Venecia fue la conquista del Peloponeso en 1684, que perdió en 1715. Durante el siglo XVIII, Italia continuó dividida y
bajo el dominio de las potencias extranjeras. Hasta 1748 fue el escenario
de las guerras de sucesión europeas en las que se redefinió un nuevo
equilibrio internacional. Venecia volvió su vista al este, el Papado quedó
cada vez más aislado y Florencia perdió definitivamente su importancia
en la zona. Saboya, situada entre Francia y las posesiones de los
Habsburgo en Italia, pasó a desempeñar un dominio cada vez mayor. El
duque Víctor Amadeo II resultó victorioso y fortaleció su poder tras la
guerra de Sucesión española. Los Tratados de Utrecht otorgaron Sicilia
al duque, que él cedió a Austria en 1720 a cambio de Cerdeña. También
mediante dichos tratados las posesiones de España en Italia fueron
transferidas al Sacro Imperio, que dominó la península Itálica durante
casi toda la segunda mitad del siglo XVIII. |