Irak

 

 

 

Proclamación de la republica

 

 

La tendencia prooccidental de la Unión Árabe, la represión que sufrían los grupos opositores y el entusiasmo que la creación de la RAU levantó entre los dirigentes nacionalistas de Irak, que veían factible llevar a cabo los ideales del panarabismo, acabaron con la monarquía. El 14 de julio de 1958 el general iraquí Karim Kassem dio un rápido golpe de Estado y se proclamó la República. Entre las víctimas del levantamiento estaban el rey Faysal, el príncipe heredero y Said. El día 15 de julio, el nuevo gobierno anunció un acercamiento a la RAU y la disolución de la Unión Árabe. Pese a ello, Kassem intentó ganarse la confianza de Occidente, manteniendo el suministro de petróleo.

En marzo de 1959 Irak abandonó el Pacto de Bagdad, que se había rebautizado como Organización del Tratado central; en junio del mismo año, abandonó el bloque de la libra esterlina, un grupo de países con monedas ligadas a esta divisa.

Cuando Gran Bretaña dio por terminado su mandato sobre el emirato de Kuwait el 25 de junio de 1960, Irak reclamó la zona argumentando que había formado parte del Estado iraquí en el momento de su formación. Los británicos desplegaron tropas en Kuwait en julio, invitados por su gobernante, y el Consejo de Seguridad de la ONU rechazó la petición iraquí de que estas fuerzas fueran expulsadas.

Mientras tanto, en el interior del país continuaba la agitación de los kurdos, pese a las declaraciones del gobierno en 1961 y 1962 de que se había acabado con la revuelta. Este largo conflicto se aparcó momentáneamente a principios de 1970, al aceptar el gobierno la formación de una región autónoma kurda, e incorporar ministros kurdos en el gabinete estatal.