Filipinas
 

 

 

Flora y fauna

 

Aproximadamente el 37% de la superficie de Filipinas está cubierta por bosque o monte. Entre los árboles destacan el banyan (o Ficus Benghalensis), diferentes variedades de palmeras, árboles de los que se extrae el caucho y muchos árboles autóctonos de maderas muy duras como el apitong, el yacal, el lauan, el camagón, el ipil, el narra blanco y rojo y el mayapis. El bambú y las plantas de la canela, el clavo y la pimienta crecen de forma silvestre, al igual que numerosas especies de orquídeas. Una de las plantas autóctonas más valiosas es el ábaca (o cáñamo de Manila) un yantén cuya fibra se utiliza para hacer cuerdas, textiles y sombreros. Los manglares y las palmeras de nipa crecen en los pantanos costeros, y grandes áreas de las tierras altas están cubiertas por hierbas gruesas de escaso valor para la ganadería. Excepto en el caso de los roedores, comparativamente se encuentran pocas variedades de mamíferos en las islas. Los más importantes son el búfalo de agua domesticado (denominado carabao) varias especies de venados, jabalíes salvajes y domesticados, las mangostas y una variedad de vacas jorobadas. También hay gran número de reptiles y unas 760 especies de aves, incluyendo loros multicolores. En Filipinas hay una gran cantidad de fauna marina en las aguas costeras, particularmente moluscos. Las ostras perlíferas abundan en el archipiélago de las Sulú, en el extremo suroccidental, cuyas perlas son muy famosas.