Asia |
Introducción
Asia, el más grande de
los seis continentes que constituyen la Tierra. Incluidas las regiones
insulares, abarca un área de unos 44.936.000 km2: aproximadamente, una tercera parte de la superficie terrestre.
Sus habitantes representan tres quintas partes de la población total del
mundo. A finales de la década de 1990, Asia tenía más de 3.400 millones
de habitantes. Situada casi en su totalidad en el hemisferio norte,
Asia limita al norte con el océano Glacial Ártico; al este, con el
estrecho de Bering y el océano Pacífico; al sur, con el océano Índico,
y al suroeste, con el mar Rojo y el mar Mediterráneo. Al oeste, la
frontera convencional entre Europa y Asia, marcada por los Urales, se
prolonga hacia el sur por el río Ural hasta el mar Caspio, continuando
después hacia el oeste por el Cáucaso hasta el mar Negro. Muchos geógrafos
prefieren considerar la masa continental formada por Europa y Asia un solo
continente, denominado Eurasia. La tierra firme del continente asiático se extiende
desde el extremo meridional de Malaca hasta el cabo Chelyuskin, en
Siberia. Su punto más occidental es el cabo Baba, al noroeste de Turquía,
y su punto más oriental es el cabo Dezhneva, al noroeste de Siberia. El
mayor ensanchamiento del continente de este a oeste, su mayor amplitud
longitudinal, alcanza los 8.500 km aproximadamente. En Asia se hallan
el punto más bajo de la superficie terrestre, la costa del mar Muerto
(395 m por debajo del nivel del mar) y el punto más alto, el monte
Everest (a 8.848 m sobre el nivel del mar). Al sureste de la masa continental hay un conjunto
impresionante de archipiélagos e islas, que se extiende, hacia el este,
hasta Oceanía. Este conjunto está formado por las islas de Filipinas e
Indonesia, que, a su vez, incluye las islas de Sumatra, Java, Célebes (Sulawesi),
Borneo y Nueva Guinea. Al norte se extienden Taiwan, las islas que
constituyen Japón y Sajalín. Por su parte, Sri Lanka y grupos de islas
menores, como Maldivas y las islas Andamán y Nicobar están situadas en
el océano Índico. A causa de sus enormes dimensiones y carácter diverso,
Asia se divide por comodidad en cinco regiones principales. Éstas son: la
región asiática de la antigua Unión Soviética (conocida como Asia
central soviética), que incluye Siberia, Asia centro-occidental y la
vertiente meridional del Cáucaso; Asia oriental, que comprende China, Tíbet,
Mongolia, Corea del Norte y Corea del Sur y Japón; el Sureste asiático,
que comprende Myanmar (antigua Birmania), Tailandia, Camboya, Laos,
Vietnam, Malaysia, Singapur, Indonesia, Brunei y Filipinas; Asia
meridional, que abarca India, Bangla Desh, Pakistán, Sri Lanka, Nepal y
Bután; y el Suroeste asiático, que comprende Afganistán y los países
integrantes de la región que normalmente se denomina Oriente Próximo —Irán,
Irak, Turquía, Siria, Líbano, Israel, Jordania, Kuwait, Arabia Saudí y
el resto de los estados de la península Arábiga. El continente, no obstante, también se puede dividir
en dos grandes áreas culturales, entendiendo por tal aspectos étnicos,
lingüísticos y religiosos: una gran área que se podría denominar
espacio cultural suroriental (el Este y el Sureste asiático), en el que
primarían los pueblos mongoloides (xantodermos), las lenguas
chinotibetanas y malayo-polinesias y las religiones budista y sintoísta;
y otra llamada espacio cultural centro-suroccidental (la región asiática
de la antigua Unión Soviética, el Suroeste asiático y Asia meridional),
caracterizado por la presencia de pequeñas poblaciones mongoloides en la
primera de ellas junto a grupos leucodermos (caucasoides), mayoritarios en
las otras dos regiones, y en donde las lenguas más habladas son las semíticas,
las indoeuropeas y las altaicas, y las religiones predominantes el islam,
el hinduismo y, en menor medida, el cristianismo. |