La Cerámica

Moldes, Decoración y Hornos

 

Moldes.

 

Para hacer piezas a base de moldes es necesario elaborar primero la pieza modelo o “positivo” la cual sirve para vaciar en yeso una forma “en negativo” que será la que se utilice en lo sucesivo vaciando o colocando y presionando en ella el barro que formará la pieza moldeada. Esta técnica ofrece la ventaja de avanzar con rapidez en la fabricación de muchas piezas iguales, pero al mismo tiempo, justamente por ser iguales, las piezas no pueden alcanzar el valor de las que son construidas directamente y una por una.

  Decoración.

La decoración de las piezas de barro puede ser muy variada. Existen muchos métodos para decorarlas. Los más importantes son el esmaltado, el engobe y el esgrafiado. El esmaltado consiste en pintar el barro con esmaltes preparados a base de diferentes minerales, lo cual puede producir una gama muy amplia de colores. El engobe es una mezcla de barro con pigmentos que también se usa para pintar o cubrir la superficie de las piezas. Generalmente encima del engobe se aplica un esmalte. Los engobes y los esmaltes pueden aplicarse con pincel, con pistola aspersora, puede sumergirse parte de la pieza o toda ella en los esmaltes, puede ser salpicada con ellos, etc.

El esgrafiado consiste en dibujar con diferentes herramientas la superficie de la pieza, marcando en el barro mismo el dibujo, como un grabado. La cantidad que existen para este tipo de decoración es grande, y depende de la imaginación del ceramista, quien puede grabar sus piezas con puntas, fierros, navajas, alambres, sellos, etc. El esgrafiado se realiza normalmente cuando la pieza está cruda, cuando el barro aún está húmedo y puede ser marcado con cierta facilidad. Ambas técnicas pueden ser combinadas en una misma pieza.

 

El horno.

Este es el último paso en la fabricación de una pieza de cerámica. Es también el momento después del cual se observa el resultado del trabajo que se inicia con la recolección u obtención de la materia prima. El fuego del horno tiene la función de convertir el barro en piedra y dar origen a una pieza que como ya vimos en otra parte de este trabajo durará por muchísimos años. También en el fuego los esmaltes y engobes aplicados adquirirán su color final, para dar a las piezas el acabado deseado de acuerdo con el fin para el que han sido creadas. Un horno para cerámica puede calentarse por medio de leña, de elctricidad o de gas.