Los Aztecas

Comercio

 

Grupos Productores

La actividad comercial era realizada por mercaderes, quienes operaban a través de organismos regulares (Pochtecayótl) y cubrían extensas zonas que comprendían todo el Imperio Azteca, desde el Golfo de México al Océano Pacífico y de los límites Norte a los límites Sur. La necesidad de aprovechar los recursos de zonas alejadas y hasta estrechas, fomentó el comercio, ya que lo mismo importaban comestibles que exportaban los suyos, adquirían y exportaban también productos suntuarios para las clases privilegiadas (plumaria, artes decorativas, piedras preciosas, orfebrería y platería, etc.). Se usaba generalmente el sistema de trueque,  aunque pronto se usó algún elemento de valor simbólico a manera de la desconocida "moneda".

 

 

Gran Mercado de  Tlatelolco

 

 Cuando se fundó la gran Tenochtitlán, un grupo de pobladores no quiso quedarse y se fueron a vivir a un islote situado al norte de la ciudad donde fundaron el pueblo de Tlatelolco. Tanto Tenochtitlán como Tlatelolco crecieron mucho, a tal grado que casi se unieron. Los habitantes de estas ciudades no se querían. El cacique Tlatelolco tramó una conspiración contra Axayácatl, con objeto de darle muerte y apoderarse de Tenochtitlán.  Dándose cuenta de esta conspiración el Rey Mexica determinó hacer la guerra a los Tlatelolcos, trabándose una feroz batalla que duró dos días, en que los aztecas vencieron a los de Tlatelolco. Pasando entonces Tlatelolco a ser un barrio más de la gran Tenochtitlán. En cada población del imperio había mercado cada cinco días. En Tlatelolco, el mercado era una plaza rodeada de portales, mercado que pasó a ser el de más importancia en la gran Tenochtitlán. Cada clase de mercancía se vendía en un lugar determinado; se comerciaba con oro, plata, plumas finas, cuentas y espejos de obsidiana, mantas de algodón, huaraches, cuchillos, joyas, muebles, animales, esteras, pieles, bateas, armas, legumbres, maíz, etc., etc.. En la gran aglomeración de gentes los días de plaza, se hacían notorias las diferentes castas sociales que eran cuatro: sacerdotes, guerreros, mercaderes y macehuales. Las dos primeras clases eran las más poderosas. El Rey era también sumo sacerdote. Los aztecas no tenían moneda; usaban en su lugar granos de cacao, hachuelas de cobre, tejuelas de oro y canutos de plumas de ave llenos de polvo de oro.