algo
maltratado: se atenúe como se quiera, la inconsecuencia es patente si
recordamos cómo quedó Sancho en I-VIII: "[...] sin dejarle pelo en las
barbas, le molieron a coces y le dejaron tendido en el suelo, sin aliento ni
sentido" (85).
más
adelante: 'más todavía, algo más'.
la
falda de la loriga: 'las mallas de la loriga que colgaban por debajo del
arnés'. "Loriga. Armadura del cuerpo, hecha de láminas de acero,
que por otro nombre llaman corazas" (Tesoro).
a
paso tirado: 'con paso largo y rápido, deprisa'; comp.: "volviendo las
riendas, a paso tirado se desvió de todos" (G, II, 260).
...iglesia:
porque los delincuentes y malhechores se refugiaban en las iglesias (Git.,
490, n. 191; CE, 703, n. 3; CP, 956; etc.) -se acogían a
sagrado-, amparándose en su derecho de asilo, para evadir a la justicia. "Acogerse
a la Iglesia. Frase tomada de los delincuentes y malhechores, que se
refugian a la Iglesia" (Autoridades).
Santa
Hermandad: era la policía rural, creada por los Reyes Católicos, con
tribunal propio, cuyos "cuadrilleros" voluntarios velaban por la
seguridad en los campos y caminos. La Santa Hermandad tiene que ver con los
que pelean en el campo, dirá Sancho enseguida. Y, en concreto, se trata de
una de las tres "Hermandades viejas", la de Ciudad Real (las otras dos
eran las de Toledo y Talavera), en cuya jurisdicción se incluía, además de la
Mancha, Sierra Morena, donde después se ocultarán nuestros héroes.
sudar
el hopo: 'sudar el pelo' ('las pasaremos canutas'). "Sudar el hopo.
Frase vulgar con que se da a entender que alguna cosa es en sí tan dificultosa
y penosa que costará mucho trabajo y fatiga antes de conseguirla o
ejecutarla" (Autoridades). "Asgamos la ocasión por el harapo,
/ por el hopo o copete, como dicen" (RD, I, vv. 696-97, 308).
omecillos:
'rencores'. Lógicamente, Sancho asocia el cultismo homicidios con el
término antiguo y rústico homecillo: "Vocablo castellano antiguo
que, no embargante se haya dicho de homicidio, muchas veces sinifica tan
solamente enemistad, quistión, contienda, riña" (Tesoro; y "omecillo:
mala voluntad y aborrecimiento de muerte"). El pastor del cuento que
refiere Sancho en I-XX convertirá su amor en "omecillo y mala
voluntad" (187, n. 29).
caté:
'guardé, tuve, sentí [omecillo]'.
te
sacaré ...caldeos: 'te sacaré de apuros, te libraré de cualquier
prisión', en alusión bíblica (Jeremías, XXXII-IV).
ungüento
blanco: por su color, pues el medicamento se hacía con cera, albayalde
('sustancia alcalina extraída del plomo' [vid. RC, 583, n. 174]) y
aceite rosado.
bálsamo
de Fierabrás: aunque a Sancho lo pondrá al borde de la muerte (I-XVII), se
trata de un brebaje milagroso -seguramente no tanto como dice más abajo don
Quijote-, procedente del bálsamo con que fue embalsamado Jesucristo y capaz de
sanar las heridas de quien lo bebía, que Cervantes aprovecha para aportar una
faceta más a sus afanes paródicos del mundo literario caballeresco. En este
caso, quizás se apunte contra la Historia del emperador Carlomagno
(Sevilla, 1525), traducción de una adaptación en prosa del viejo cantar de
gesta carolingio Fierabrás (c. 1170). Por otro lado, Cervantes parece
haber encarrilado ya su "historia" para algo más de "dos
horas", pues en el presente capítulo introduce dos elementos básicos de
su parodia caballeresca: el bálsamo de Fierabrás y, enseguida, el yelmo
de Mambrino, a los que tanto partido novelesco les sacará después.
sotileza:
así desde P2, aunque P dice sotiliza, que no mantenemos (sí MR,
CL, LM, VG, etc.) por considerarla errata, pues es forma extrañísima -por sutileza-
en los textos de la época y nunca más utilizada por Cervantes.
tres
azumbres: la burla es patente, pues, frente a las gotas o tragos
anteriores, ahora don Quijote habla de hacer entre seis y siete litros (el azumbre
equivalía a poco más de dos [RC, 585, n. 192]).
pensó:
'creyó, estuvo a punto de'.
más...
escritos: porque -como anota RM-, cuando no se tenían a mano los Evangelios,
se sustituían por algunas hojas con los primeros versículos, añadiendo está
fórmula de juramento.
...Valdovinos:
Vid. V, ns. 2-11. Según el romance, las cosas que no recuerda don
Quijote (pero, curiosamente, sí Sancho, según dirá más abajo) son: "de
nunca peynar mis canas / ni las mis barbas cortare, / de no vestir otras ropas /
ni renovar mi calçare, / de no entrar en poblado / ni mis armas me quitare /
[...] / de no comer a manteles / ni a la mesa me assentare / fasta matar
a Carloto" (VG). En todo caso, son motivos -el no folgar incluido-
frecuentes en el romancero. Vid. I-XXXI, n. 8.
tal
y tan buena: recuérdese que era mitad morrión y mitad cartón (I-I, n.
30).
a
humo de pajas: 'a la ligera, sin reflexión, a tontas y a locas';
"baldíamente, sin cuenta, ni razón ni orden", explica Correas (Refranes,
603a).
yelmo
de Mambrino: es el yelmo encantado que Reinaldos de Montalbán arrebata, en
el Orlando innamorato, al moro Mambrino, y que protege al héroe contra
los golpes de Dardinel (no de Sacripante), quien después muere, en el Orlando
furioso. El próximo cap. XXI girará en torno a este motivo, también
tratado paródicamente.
más
armados...: en ese caso, 'más de dos millones', pues de otros tantos
constaba el ejército de Agricane cuando vino sobre el castillo del rey
Galafrone del Catay para liberar a Angélica, según cuenta Boiardo en el Orlando
innamorato (I-X y ss.).
prazga:
'plazga', en uso rústico.
y
muérame yo luego: es el segundo v. de una cancioncilla tradicional:
"Véante mis ojos / y muérame yo luego, / dulce amor mío / y lo que yo
más quiero" (cfr. M. Frenk, Corpus de la antigua lírica popular
hispánica (siglos XV a XVII), Madrid, Castalia, 1987, n°. 428 [y vid.
1385], 196).
Soliadisa:
así P, quizás por alusión a tal infanta, que aparece en La historia
del muy valiente y esforzado caballero Clamades, [...] y de la linda Clarmonda,
hija del rey de Toscana (Burgos, 1562), aunque desde P2 se cambió (incluso
RM y SB) por Sobradisa, reino que sí se menciona en el Amadís
(I-XLII: "aquella gran cibdad que Sobradisa se llamava, donde todo el reino
por esta causa tomava aquel nombre" [Cacho, I, 631] de él era natural
Briolanja). No es, ni mucho menos, enmienda segura, lo que explica que respeten P
casi todos los editores recientes (CL, MR, JA, LM, AA, VG, JF, etc.).
porque
vamos luego: 'para que vayamos enseguida'.
en
flores: 'en cosas sin sustancia'. "Irse todo en flores, no haber
cosa de sustancia" (Tesoro, s.u. floreo). En CAE se lee:
"Finalmente, nuestra plática se pasó en flores [...], sin que
llegase a coger el fruto que deseaba" (880). Recuérdese, sobre el Tirant,
I-VI, n. 41.
acto
posesivo: o positivo, según propone RM, es el 'hecho que prueba la
nobleza y limpieza de una persona para el ejercicio de un cargo', como se
desprende del propio texto.