Los Sentidos

 

El Tacto

El tacto, en realidad, puede recibir dos tipos de datos; temperatura y presión, porque tiene termorreceptores y mecanorreceptores.

A través del tacto, el cuerpo percibe el contacto con las distintas sustancias, objetos, etcétera. Los receptores se estimulan ante una defor­mación mecánica de la piel y transportan las sensaciones hacia el cerebro a través de fibras nerviosas. Los receptores se encuentran en la epidermis, que es la capa más externa de la piel, y están distribuidos por todo el cuerpo de forma variable, por lo que aparecen zonas con distintos grados de sensibilidad táctil en función del números de receptores que contengan.

Existe una forma compleja de receptor del tacto en la cual los termi­nales forman nódulos diminutos o bulbos terminales; a este tipo de recepto­res pertenecen los corpúsculos de Pacini, sensibles a la presión, que se encuentran en las partes sensibles de las yemas de los dedos. El tacto es el menos especializado de los cinco sentidos, pero a base de usarlo se puede aumentar su agudeza; como los ciegos, para leer las letras del sis­tema Braille.

Corpúsculos de Pacini

Están ubicados en la zona profunda de la piel, sobre todo en los dedos de las manos y de los pies, pero son poco abundantes

Se tratan de dendritas encapsuladas en clavas (células de la neuroglia) ro­deada de tejido conectivo fibroso.

Detecta presiones y deformaciones de la piel, y sus estímulos duran poco

Terminaciones nerviosas libres

Están en casi todo el cuerpo, sólo son dendritas que se ramifican entre las células epiteliales. Se especializan en percibir dolor

Terminaciones nerviosas de los pelos

Sensibles al contacto, como pueden ser los bigotes de un gato (en realidad sucede con la mayoría de los pelos)

Corpúsculos de Meissner

Se encuentran en las papilas dérmicas, abundantes en el extremo de los dedos, los labios, la lengua, etc. Se ubican en la zona superficial de la piel. Están especializadas en el tacto fino.

Corpúsculos de Krause,

Presentes en la superficie de la der­mis y sensibles al frío, se ubican en especial en la lengua y los órganos sexuales. Son dendritas ramificadas y encapsuladas.

Corpúsculos de Rufini

Poco numerosos, alargados y más pro­fundos que los de Krause, sensibles al calor

El sistema en el que se basa el tacto es que cualquier deformación de la piel comprime corpúsculos, que envía el impulso al SN.