Europeo de Pelo Corto |
Origen: se denominan
así todos los gatos de pelo corto que habitan en Europa e incluso fuera de
ella, siempre que hagan vida doméstica. Su origen es incierto, parece que
deriva del gato africano o gato de Libia que introdujeron los romanos en el
continente europeo hace cerca de dos mil años. Lo que si se puede afirmar
es que la raza data de la más remota antiguedad y constituye, probablemente,
la más genuina de las razas felinas. Aunque muchos gatos que no son de pura
raza se clasifican bajo esta denominación, procede de los cruzamientos
entre europeos comunes, se han sucedido etapas de diferente popularidad que,
debido a la rareza de ejemplares "puntuables", han culminado en
una tolerancia de los estándares con objeto de recuperar este precioso y
robusto gato.
Cabeza: bien
redondeada y de dimensiones acordes con el cuerpo, debe tener orejas
separadas y nunca de gran tamaño. Las manchas faciales han de cubrir ideal
y simétricamente las mejillas, cráneo y orejas, siendo blanca la nariz,
hocico, barbilla, pecho y cuello. Los ojos, grandes, redondeados y muy
expresivos, son de color de acuerdo con la tonalidad del manto.
Carácter: suelen ser independientes, audaces, seguros de su propia fuerza, pero muy cariñosos con sus amos y a veces resultan empalagosos por su insistencia en reclamar caricias. De gran limpieza, dedican varias horas diarias a su aseo y estado físico, pero también se muestran curiosos y juguetones. Su temperamento resuelto, puede acarrearles dificultades y accidentes de diversas índoles y magnitudes. Cuidados: requiere pocas atenciones específicas, baño y cepillado esporádicos. Defectos: se consideran excluidos los ejemplares que presentan en su pelaje corto, apretado y sedoso, color blanco en más de dos terceras partes del cuerpo. Cabeza triangular. |