No todos los dinosaurios carnívoros eran gigantes. Dinosaurios veloces y livianos como el Coelophysis estaban bien diseñados para cazar otros dinosaurios más chicos, lagartos e insectos. A pesar de medir sólo diez pies de largo de cola a cabeza y pesar 60 libras, tenía afilados dientes y garras y era un ágil cazador.